El amor es un tema que suele suscitarnos interés. Y es uno de los aspectos que más llegan a preocupar e inspirar a las personas que atiendo en consulta. Muchas veces surgen dudas sobre lo que es normal o no en una relación de amor, cuáles son los límites infranqueables para no caer en relaciones tóxicas, cómo descifrar si lo que se siente por la pareja es suficiente y un largo etcétera.
Estas respuestas están sujetas a cada vivencia de quien las piensa y de quien las siente así que las abordo en sesión atendiendo la particularidad de cada caso. Pero sí que hay algunos planteamientos más universales que siembran nuevas apreciaciones acerca del sentido del amor, la diferencia entre amar y querer, los motivos que a cada cual les hace sostener (o no) la pareja... Y los reflexionamos en sesión con el fin de que cada uno pueda cuestionarse su posición contemplando más perspectivas y tomando mayor consciencia de sus elecciones e implicaciones.
¿Te apuntas?
Si es así te invito a que reflexiones sobre algunas cuestiones:
¿El otro está para cubrir tus EXPECTATIVAS?
¿Tú estás para cubrir las del otro?
¿Se tiene que FORZAR el AJUSTE mutuo?
¿Basta con sentir amor para que una relación sea propicia y saludable?
¿Es lo mismo AMAR que QUERER?
Para estimular más debate y poder plantearse algunas cuestiones, las imágenes que siguen hacen una distinción entre lo que es la QUÍMICA y la ALQUIMIA en el amor. Puedes aprovechar estas descripciones para replantearte algunos aspectos y e ir definiendo los parámetros que son más adecuados para tí a la hora de construir una relación de AMOR lo más autónoma y equilibrada posible.
Estas definiciones vienen dadas a través del siguiente relato:
“Le preguntaron al sabio cuál era la diferencia entre la química y la alquimia en las relaciones de pareja y contestó estas hermosas e inteligentes palabras:
Las personas que buscan "Química" son científicos del amor, es decir, están acostumbrados a la acción y a la reacción. Las personas que encuentran la "Alquimia" son artistas del amor, crean constantemente nuevas formas de amar.
Los Químicos aman por necesidad,
los Alquimistas por elección.
La Química muere con el tiempo,
la Alquimia nace a través del tiempo...
La Química ama el envase,
la Alquimia disfruta del contenido.
La Química sucede,
la Alquimia se construye.
Todos buscan Química,
solo algunos encuentran la Alquimia.
La Química atrae y distrae a machistas y a feministas.
La Alquimia integra el principio masculino y femenino,
por eso se transforma en una relación de individuos libres y con alas propias,
y no en una atracción que está sujeta a los caprichos del ego.
En conclusión, dijo el Maestro mirando a sus alumnos:
La Alquimia reúne lo que la Química separa.
La Alquimia es el matrimonio real,
la Química el divorcio que vemos todos los días en la mayoría de las parejas”
Después de leerlo, ¿Con qué te identificas más? ¿Buscas la química o encuentras la alquimia en tus relaciones de pareja?
Y para acabar añado una reflexión de Fritz Perls en sintonía a lo anteriormente comentado. Si queréis compartir vuestras impresiones al respecto estaré encantada de leerlos.
Yo soy Yo. Tú eres Tú. Yo no estoy en este mundo para cumplir tus expectativas. Tú no estás en este mundo para cumplir las mías. Tú eres Tú. Yo soy Yo. Si en algún momento o en algún punto nos encontramos será maravilloso. Si no, no puede remediarse. Falto de amor a Mí mismo cuando en el intento de complacerte me traiciono. Falto de amor a Ti cuando intento que seas como yo quiero en vez de aceptarte como realmente eres. Tú eres Tú y Yo soy Yo.
